Una deliciosa propuesta para baguette francesa

La baguette francesa es una de las recetas tradicionales con más historia y, por supuesto, una de las más populares del mundo.

Y no es para menos. Con pocos ingredientes, se consigue un producto espectacular con un contraste delicioso de texturas entre una corteza crujiente y una miga suave y alveolada. Recientemente, nos enteramos de que Francia ha decidido presentarla como candidata a ser patrimonio inmaterial de la UNESCO. No sabemos si será la elegida, pero, en cualquier caso, desde Levanova queremos enseñaros una original receta de la famosa baguette francesa, para que, sin moveros de casa, podáis disfrutar del auténtico sabor del pan francés por excelencia.

Además, ¡os traemos la receta en vídeo!

La receta ilustrada:

Ingredientes:

• 500grs de harina de trigo
• 8 grs de sal
• 15 grs de levadura fresca Levanova
• 1 sobre de masa madre de trigo
• 330 grs de agua

Elaboración:

Paso 1:

Lo primero que haremos, para comenzar, es hacernos con un bol grande. En él, vamos a ir vertiendo, uno a uno, los ingredientes. En primer lugar, echamos los 500 grs de harina de trigo. Seguidamente, incorporamos 8 grs de sal, 15 grs de levadura fresca Levanova que desmenuzaremos con los dedos y un sobre de masa madre de trigo Levanova. Así pues, para terminar con la mezcla, incluimos los 330 grs de agua.

Paso 2:

Una vez tenemos todos los ingredientes en el recipiente, mezclamos hasta obtener una masa compacta. Después, cuando ya tenemos la masa formada, enharinamos una superficie plana y comenzamos a amasar con nuestras manos doblándola sobre sí misma. Esto se hace para que se forme la red de gluten encargada de atrapar el aire y dar volumen al pan.

Como resultado, tras 8 o 10 minutos de amasado, obtendremos una masa fina y homogénea. Con esta textura, creamos una bola y volvemos a introducirla en el bol cubriéndola con un paño de cocina.

Paso 3:

Dejamos reposar la masa hasta que podamos ver que ha doblado su tamaño. En ese momento, con la masa ya fuera del bol, la dividimos por la mitad y le damos forma, modelando dos barras de, aproximadamente, 45 cm de largo cada una.

A continuación, previo al horneado, en la misma bandeja del horno dejamos fermentar de nuevo las dos piezas, hasta que éstas hayan doblado su tamaño. Como consejo, para evitar que las barras de pan se nos queden pegadas cuando aumenten su volumen, debemos colocarlas con separación entre ambas y ponerlas sobre un papel de horno.

Paso 4:

Llega el momento del horneado. Para ello, precalentamos el horno a 210ºC con calor arriba y abajo. Con el horno ya precalentado, hacemos varios cortes sobre la superficie de cada una de las barras, por ejemplo, sirviéndonos de un cuchillo. Después, las introducimos en el horno durante aproximadamente 25 minutos a una temperatura de 185 ºC, hasta que la corteza tenga un aspecto dorado.

¿Has visto lo sencillo que es disfrutar de uno de los panes más deliciosos con nuestra receta casera?

Esperamos que os animéis a hacer esta receta y, como siempre, compartáis con nosotros el resultado a través de nuestras redes sociales: Instagram y Facebook.