El pan polar es un pan de origen sueco, cuyo significado hace honor a su aspecto y textura, pues allí es coloquialmente conocido como “pan fino o delgado”. Sin lugar a dudas, se trata de una apuesta segura para acompañar comidas o incluso para ser su ingrediente base, pues se puede elaborar muchos platos distintos con pan polar como protagonista. Además, también es ideal para preparar desayunos o meriendas de lo más originales, ya que admite la combinación de cualquier tipo de ingrediente.
Una de las peculiaridades de este pan reside en su elaboración, pues hay que cocerlo en una sartén. Para que puedas disfrutar de esta esponjosa y ligera delicia, desde Levanova te presentamos una receta fácil de elaborar.
En primer lugar, mezclaremos las dos harinas, tanto la de fuerza como la harina de centeno, e incorporaremos a esta mezcla la miel, la sal, el yogurt griego, las semillas y los 180 ml de agua. Es importante que nos ayudemos, por ejemplo, de una cuchara de madera para que los ingredientes se integren a la perfección. Por otro lado, vamos a incluir a la mezcla la levadura fresca Levanova y el sobre de masa madre Levanova al completo. Seguidamente, iremos amasando el resultado hasta que consigamos que la textura de la masa carezca de grumos y sea completamente lisa.
Es muy importante que dejemos reposar esta pasta hasta que la masa madre fermente y adquiera mayor volumen. Para ello, debemos estar sin trabajarla un tiempo estimado de aproximadamente una hora.
Transcurrido este tiempo, dividiremos la masa en tantas porciones como consideremos oportuno. Después, deberemos trabajar cada una de ellas por separado. Es decir, las separaremos, bolearemos y estiraremos de una en una con ayuda de un rodillo hasta obtener varias circunferencias planas.
Una vez cada ración haya adquirido la forma y tamaño deseados, haremos agujeritos sobre su superficie con un palillo o un tenedor, preferiblemente mediante líneas perpendiculares, para evitar que la masa se hinche durante su cocción.
Para terminar, calentaremos una sartén a fuego medio, sin gota de aceite, e incluiremos las porciones una a una. El tiempo de cocción es más o menos de dos minutos por cada cara. El momento perfecto para su retirada será cuando apreciemos que se han dorado, evitando que se nos quemen.
El pan polar podemos presentarlo de diversas maneras, desde Levanova nos gusta jugar con la imaginación, por lo que, al tratarse de un pan con una textura especialmente blandita se nos permitirá jugar con su forma.
Una buena opción es enrollarlos y disfrutarlos de acompañamiento de cualquiera de nuestros platos favoritos, pues, gracias a las semillas de hinojo y anís, ya por si solos tienen un sabor de lo más especial. También podemos hacer de este pan un plato principal, presentándolo relleno, por ejemplo, de jamón york y queso, o de aguacate y salmón, entre otras muchas alternativas. Además, este tipo de pan también es ideal para comerlo en armonía con diferentes salsas.
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