Actualmente, muchas personas optamos por las versiones integrales de alimentos que consumimos en nuestro día a día. Ya sea por gusto o estilo de vida, incluir el pan integral en nuestra alimentación tiene varios beneficios. Por ello, os traemos los pasos a seguir para elaborar de forma fácil y rápida un pan de molde integral casero.
Lo primero de todo es conocer la diferencia entre el pan blanco y el pan integral, y es que este último está elaborado con harina no refinada, es decir, harina elaborada a partir del grano de cereal entero (incluyendo por tanto germen, endospermo y salvado). Eso supone que el pan resultante nos aportará una buena cantidad de fibra, minerales y vitaminas y contribuirá a controlar nuestro colesterol. Por su parte, sensorialmente el pan integral tendrá un color más oscuro, una miga más densa y ciertas notas aromáticas amargas.
Hacer pan de molde integral en casa es muy fácil, además de muy satisfactorio ya que como resultado tendremos una elaboración muy versátil que nos servirá tanto para hacer tostadas, como para preparar sándwiches o para acompañar cualquier comida. Además, otro de los grandes beneficios de hacerlo casero es que podremos cortar las rebanadas del tamaño que prefiramos. ¡Todo ventajas!
Una vez dicho esto, ¡Atentos a la receta!
En un bol grande, añadimos el agua, la leche, el azúcar, la sal y la masa madre. Lo mezclamos y añadimos la levadura, desmenuzándola con las manos. Volvemos a mezclar y dejamos reposar durante 5 minutos.
A esta mezcla, le añadimos la harina. Volvemos a mezclar y dejamos reposar otros 5 minutos con el bol tapado.
Agregamos la mantequilla y mezclamos. Después, amasamos ya sobre la encimera hasta conseguir una masa fina y homogénea. Consejo: para facilitar el amasado, podemos hacer una pausa de 10 minutos a la mitad del proceso. Tras finalizar el amasado, metemos la masa en el bol y dejamos que repose 30 minutos.
Una vez que la masa haya reposado media hora, la sacamos del bol y la dividimos en dos partes iguales. Formamos dos barrotes y los hacemos rodar sobre la encimera hasta que tengan la longitud de los moldes. Después, los colocamos en los moldes, previamente engrasados para evitar que las piezas se peguen y los dejamos fermentar hasta que doblen su volumen.
Con el horno precalentado a 175ºC, cocemos los panes durante aproximadamente 20-25 minutos, o hasta que veamos que están bien dorados.
¡Deja enfriar y a disfrutar!
Y si te apetece la versión no integral, os recordamos que en este blog de Levanova ya os dejamos en una ocasión una receta de pan de molde, también, con vídeo, que podéis consultar aquí.