El pan de molde de cacao es una creación moderna, una deliciosa variante que combina la versatilidad del pan de molde tradicional con el placer indulgente del chocolate. Perfecto para aquellos días en los que se necesita un poco de consuelo en forma de chocolate sin renunciar a la sencillez de un buen pan.
Aunque el pan de molde ha sido un básico en las cocinas de todo el mundo desde el siglo XVIII, añadir cacao es una innovación más reciente que aporta una nueva dimensión de sabor. Este toque chocolateado no solo enriquece su sabor, sino que también invita a experimentar con diferentes acompañamientos, desde mermeladas de frutas caseras hasta cremas de cacahuetes o avellanas.
Preparar pan en casa no solo es una actividad relajante, sino también una oportunidad para crear recuerdos en la cocina. El proceso de amasar y ver cómo la masa cobra vida en el horno es simplemente mágico. Así que ponte el delantal, prepárate para ensuciarte un poco las manos y disfruta del aroma y sabor de tu propio pan de molde de cacao.
Empieza mezclando en un bol grande la harina, la levadura fresca Levanova, el agua, la sal, el azúcar, el cacao en polvo y el aroma de vainilla. Deja reposar unos minutos y añade la mantequilla y las pepitas de chocolate.
Amasa la mezcla hasta conseguir una masa homogénea y luego deja reposar unos 10 minutos. Repite este proceso de amasado y reposo hasta que tengas una masa lisa y fina.
Deja reposar 30 minutos. Después, divide la masa en dos piezas iguales para formar barrotes.
Corta cada una de las piezas en tres trozos iguales y dale forma de bastón. Trenza los barrotes y coloca las dos trenzas resultantes en moldes que hayan sido previamente engrasados con mantequilla.
Deja fermentar la masa hasta que doble su volumen y luego pulveriza la superficie con abundante agua. Una vez que el horno esté precalentado a 180ºC, introduce los moldes en el horno a 220ºC durante unos 23 minutos.
¡Y listo! Es el momento de servir este pan con tus acompañamientos favoritos y disfrutar del crujiente exterior y el suave interior de cada rebanada. ¡Que aproveche!