Si os encanta hacer hamburguesas en casa tanto como a nosotros, para disfrutarlas completamente personalizadas y a vuestro gusto, ¡atentos a esta receta para el pan de hamburguesa casero!
Seguro que desde el primer momento que os animéis a prepararla, os encantará.
En primer lugar, echamos todos los ingredientes en un bol grande. Añadimos la harina, el azúcar, la sal, la levadura fresca y todo el contenido del sobre de masa madre Levanova. Como bien sabéis, en Levanova somos profesionales del pan. Por ello, aunque ya tenéis por aquí alguna receta de pan, no queríamos dejar pasar la oportunidad de dejaros otra, también de pan casero normal, pero con una aroma y una apariencia un poco más especial. Sí, seguro que has acertado, ¡gracias a nuestro preparado de masa madre!
Seguro que con esta fácil y sencilla receta de pan te convertirás en el ejemplo de cualquier huésped y en la envidia de todos los vecinos. ¡Atentos!
Movemos con una cuchara de madera y vertemos poco a poco el agua tibia. Mezclamos de nuevo, añadimos la mantequilla a temperatura ambiente y volvemos a mezclar hasta que los ingredientes queden bien integrados.
Amasamos sobre una superficie lisa hasta conseguir una masa fina y homogénea. Para facilitar el trabajo, podemos ir espolvoreando un poco de harina de vez en cuando.
Le damos forma de bola a nuestra masa y la dejamos reposar dentro de un bol tapada con un trapo de cocina hasta que doble su volumen.
Una vez haya finalizado este tiempo de reposo, cortamos la masa en cuatro partes y formamos una barra con cada una. Seguidamente, dejamos reposar las barras otros 5’ minutos tapadas con un paño de cocina.
Cortamos cada barrita en piezas de unos 50 grs y hacemos bolitas con ellas. Las tapamos con un trapo y las dejamos reposar otros 5’ minutos.
Tras este pequeño reposo, volvemos a bolear cada pieza y las aplastamos ligeramente dejando piezas redondas y planas.
Como alternativa, también se pueden hacer barritas para “Hot Dogs”/”Perritos calientes”, pues la masa es igual.
Seguidamente, volvemos a dejar reposar hasta doblar su volumen.
Encendemos el horno a 200ºC y, mientras se va calentando, humedecemos todas las piezas con agua. Lo ideal es hacerlo con un pulverizador. Por último, le echamos un poco de sésamo en la superficie y horneamos a 200ºC hasta que adquieran un color dorado-tostado.
Una vez se hayan enfriado, estos deliciosos panes estarán listos para que montes una hamburguesa a tu gusto.